martes, octubre 31, 2006

Reglas de Ascensor

Quise desempolvar un texto que escribí en otro blog, en vista de que estas cosas me siguen sucediendo.



No se si existe alguna publicación o reglamentación sobre el comportamiento antes de subir a un ascensor y dentro de él. Pero recuerdo cuando era pequeña, al ir al edificio donde está la oficina de mi padre, que él siempre decía: "Párate a un lado y primero deja que salga la gente." Debe ser que para mi se volvió una forma de vida, como cuando a uno se le queda en la cabeza aquellas frases que se dicen a todos los niños:"las damas primero", "los niños se callan cuando hablan los adultos", o "no cruces la calle sin mirar a los dos lados". Y eso haces siempre!

En las últimas semanas tuve que visitar varias oficinas en el centro de la ciudad, y me vi forzada a tomar uno que otro ascensor. A la entrada no hubo ningún incoveniente, ya que soy una fiel seguidora de la regla, al pararme a un ladito. Pero a la salida es otra historia!! En varias ocasiones, ya sea sola o con mi hermana, hubo la necesidad de decir "disculpe, me deja pasar?". Tal vez a ellos no les dijeron nunca que era mejor ponerse a un ladito.

Al comienzo uno se porta comprensivo, pero al volverse repetitiva la situación uno termina preguntándose: ¿Por qué cada vez que salgo de un ascensor, hay un hombre enorme (gordisimo!) obstruyendo el paso? Ni siquiera los flaquitos deberian estar ahi... Eso me trae a la memoria una vez que, bajando en un ascensor con mi hermana, veníamos contentas porque estábamos de apuro y no había nadie más, entonces no habría que parar en otros pisos. Al llegar a la planta baja, se abren las puertas y entran rápidamente, como ladrones a un banco, 3 enormes ejemplares que casi nos llevan a pasear atrapadas en el ascensor. Ahora lo recuerdo con una sonrisa, pero en ese momento los quería matar!!

Existen muchos otros tipos de "situaciones de ascensor". Hay quienes entran primero, quedan relegados al fondo y sólo van al segundo piso. Hay quienes han sobrevivido temblores o cortes de energía. Ni se diga de los desperfectos repentinos. Hay quienes han tenido que soportar sudoraciones u olores extraños. Hay quienes son autores de esas situaciones embarazosas y se delatan sin querer. Hay ascensoristas. ¿Te ha sucedido algo singular en un ascensor? Dejo el tema abierto para sus experiencias. Yo por lo pronto sólo puedo decir: Párense a un ladito!

No hay comentarios: