Chau agosto

Y casi, chau verano

Montségur

Un nuevo episodio en las aventuras en el país cátaro, esta vez en el departamento vecino. Después de 1h 50m de ruta, mi momento favorito siempre:

Los castillos fusionados con la roca me tienen fascinada!! 

Esto es lo más cerca que se puede llegar en el auto, no es un camino corto, pero el comienzo también es como me gusta:

Un caminito en el bosque de las hadas. Y luego pasó un buen rato sin que tomara fotos porque para variar, la subida no fue muy amistosa con mi cerebro y el vértigo fue la causa de un momento de angustia y llanto. Pero llegamos:

Y eso es todo! De verdad... Eso es todo el castillo, y estuvimos por horas preguntándonos como hacían para hacer esos viajes en caballo o a pie, cargados de suministros, o agua...

Ahí pueden ver la puerta trasera del castillo, desde donde se ve esto:

I'm at place called vertigo!! 

Linda visita que creo que requiere excelente estado físico (y mental). Un kilómetro más adelante por la ruta está el pueblo con el mismo nombre, donde está un pequeño museo al que se puede entrar con el mismo ticket de entrada al castillo.

Y ahora, estoy totalmente agotada. Las vacaciones están practicamente en el final, así que no creo que haya otra visita medieval tan tan pronto, pero habrán más historias. 

Es decir, si quieren saber si logro llegar a la capital dentro de los 2 próximos meses, stick around! 

Me voy al sobre :*

Silencio...

Como en la música.

Mi explicación: no es que me importe menos mi blog, es que me importa tanto que quiero que contenga palabras de aliento, fuerza, esperanza. Me tomo estas pausas en momentos "explosivos", pasan tantas cosas que quiero hablar de todo, pero muchas veces lo que quiero decir se enfoca en lo negativo; así que tomo un respiro, no digo nada, y vuelvo.

Pero no es que me voy a quedar sin decir lo que pienso, solo decido ponerlo desde otra perspectiva, y aquí voy:

Leí en algún lugar del internet que la sección de comentarios de cualquier red social es como el barrio más peligroso de una ciudad. Yo solía dirigirme a los comentarios porque nunca falta quien usa memes para hacernos reir, pero después de aquella revelación, comencé a ver los comentarios de forma diferente.

Me impresiona como la gente es capaz de vomitar opiniones, solo porque hay un espacio en blanco que sugiere "escribe un comentario". Es un vómito! Porque van cargados de toda la negatividad que ningún hígado es capaz de procesar. Sin pena, sin vergüenza... Seguramente, sin pensar. Palabras ofensivas, arrogantes y cobardes. Y me enojo, porque se creen muy sabidos, superiores o qué, pero son solo cobardes que se atreven a decir lo que dicen sólo porque están detrás de la pantalla.

Por un lado mejor, porque se me hace devastador que alguien le hable de esa manera a otra persona. Y no sólo en los comentarios, sino directo en las publicaciones... Con dedicatorias indirectas! (El famoso: "a ti te digo")

A veces se mueve mi instinto de superhéroe y me dan ganas de contestar a ciertos comentarios, los que me parecen injustos, pero creo que es como tener una discusión con un niño que se tapa las orejas y dice "soy de palo".

Así que creo que deberíamos movernos en masa y generar un cambio. Promover el uso de los espacios de libre pensamiento para construir en lugar de destruir. Usar los comentarios para felicitar, motivar, agradecer... Usar nuestras palabras de forma positiva!  

Comencemos...